domingo, 11 de marzo de 2018

EL GUERRERO DE LA LUZ

“Un guerrero de la luz comparte con los otros lo que sabe del camino.

Quien ayuda, siempre es ayudado, y tiene que enseñar lo que aprendió.

Por eso, él se sienta alrededor de la hoguera y cuenta como le fue en su día de lucha.

Un amigo le susurra: ¿Por qué revelas tan abiertamente tu estrategia? 

¿No ves que actuando así corres el riesgo de tener que compartir tus conquistas con los otros?

El guerrero se limita a sonreír, sin responder.
Sabe que si llegara al final de la jornada a un paraíso vacío, su lucha no habría valido la pena."
de Paulo Coelho, "Manual del Guerrero de la Luz"

LA PAREJA IDEAL

Nasrudin conversaba con un amigo. 
- Entonces, ¿nunca pensaste en casarte? 
- Sí, pensé –respondió Nasrudin. – En mi juventud resolví buscar a la mujer perfecta. Crucé el desierto, llegué a Damasco y conocí a una mujer muy espiritual y linda; pero ella no sabía nada de las cosas de este mundo. 

Continué viajando y fui a Isfahan; allí encontré a una mujer que conocía el reino de la materia y el del espíritu, pero no era bonita. Entonces resolví ir hasta El Cairo, donde cené en la casa de una moza bonita, religiosa y conocedora de la realidad material. 

- ¿Y por qué no te casaste con ella?
- ¡Ah, compañero mío! Lamentablemente ella también quería un hombre perfecto.
de Paulo Coelho


https://lareconexionmexico.ning.com/profiles/blogs/4-cuentos-cortos-de-paulo-coelho

LA SOSPECHA

Una vez, un hombre perdió una de sus herramientas de trabajo, y se le ocurrió que el ladrón había sido uno de los hijos de su vecino. Durante días, no podía dejar de mirar su forma de caminar, que le parecía que era la de un ladrón, y también su forma de comportarse. Al final, todo lo que hacía le parecía propio de un delincuente.
Días después, encontró sus herramientas en un camino del bosque, y desde entonces todos los gestos de su vecino le parecieron completamente normales.

LA NATURALEZA DE LA MENTE

Se trataba de un hombre que llevaba muchas horas viajando a pie y estaba realmente cansado y sudoroso bajo el implacable sol de la India. Extenuado y sin poder dar un paso más, se echó a descansar bajo un frondoso árbol. El suelo estaba duro y el hombre pensó en lo agradable que sería disponer de una cama. Resulta que aquél era un árbol celestial de los que conceden los deseos de los pensamientos y los hacen realidad. Así es que al punto apareció una confortable cama.
El hombre se echó sobre ella y estaba disfrutando en el mullido lecho cuando pensó en lo placentero que resultaría que una joven le diera masaje en sus fatigadas piernas. Al momento apareció una bellísima joven que comenzó a procurarle un delicioso masaje. Bien descansado, sintió hambre y pensó en qué grato sería poder degustar una sabrosa y opípara comida. En el acto aparecieron ante él los más suculentos manjares. El hombre comió hasta saciarse y se sentía muy dichoso. De repente le asaltó un pensamiento: “!Mira que si ahora un tigre me atacase!” Apareció un tigre y lo devoró.
Cambiante y descontrolada es la naturaleza de la mente. Aplícate a conocerla y dominarla y disiparás para siempre el peor de los tigres: el que mora dentro de ella misma.
( Sabiasmoralejas.wordpress.com)